Son octavos...
demasiado lejos para la trascendencia.
Es un buen partido. Dos colosos frente a frente, sí dos colosos, porque el Athletic es un coloso y el Barça también.
Yo quiero que gane el Barça, creo que ganará el Barça, pero tengo dudas, miedos, emociones... porque yo soy de los que hoy juego. Yo juego siempre.
Otros querrán que gane el Athletic y ya sabéis si unos esbozan la sonrisa otros se aguantan la lágrima, o no. Yo soy de los dos.
Son octavos...
demasiado lejos para la emoción.
No, para mi no... no es demasiado lejos. Nunca es lejos ni cerca. Siempre es el siguiente partido. Ni más ni menos.
Hoy, ahora, todos tenemos derecho a soñar. Mañana todo habrá pasado y nos despertaremos entre regalos y nervios... unos más contentos, otros menos... muchos indiferentes.
Son octavos...
demasiado lejos para... No. El corazón no entiende de razonamientos. No son octavos. Es un Athletic-Barça. Una eliminatoria. Que gane el que se lo merezca (y si lo merece el AThletic, que gane el Barça...)
Suerte a todos. Yo, juego hoy.
Demasiado.
1 comentario:
Yo también juego hoy, jefe.
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