The Prize de la Vida

Primero, lo menos importante...

Proximo ensayo el viernes 22 de marzo a las 19:30 horas. Sobre el ensayo del otro día, bueno, algunos comentarios: el calor era insoportable en el salón y creo que nos pudo afectar a todos. Yo, hablo de mi, estuve, especialmente cargado y me despiste al punto de perder el sentido de lo que hacemos (en parte). Mal, promete reflexionar y enmendarme en mejorar. Nada grave, pero uno no debe sentirse nunca el ombligo del mundo y yo el viernes cometí, de nuevo, ese pecado de soberbia.

El ensayo fue malo y la actitud tampoco estuvo bien. A veces, se nos olvida que lo pasamos mejor ensayando bien que mal, pero es muy tentador llegar antes que mejor. Debemos reflexionar, también, ahí. Calor al margen, la hora es las siete y media y aunque todos llegamos  sabiendo que empezamos más tarde y no tenemos prisa por salir y estiramos hasta las diez el ensayo, debemos mejorar nuestra disciplina. No, porque lo diga yo, o porque si no salga mal (que saldría mal, aunque luego nunca sale mal)... sino porque a teatro vamos porque queremos estar juntos y no porque nos pagan. En fin. Y luego un poco más de concentración, en una obra tan coral (e insisto, el viernes estábamos muchos), es necesario para disfrutar más y no solo depender del subidón del 5 de mayo... si más... Insisto, este comentario no es demasiado importante pero alguien lo tiene que decir, digo yo.

Lo importante...

Lo comentamos el 23 de diciembre sobre las 21:30, allí todos sentados (magnífico pasaje). Al día siguiente, nos esperaba la vida... El Zodiaco de la vida. Salud, dinero, amor, trabajo... No son buenos tiempos para la lírica, que diría alguno. No lo son.

Uno debe ser el cambio que desea, decía Gandhi. Pues sí, creo que es lo que tenemos a nuestro alcance y no hay mejor vocación que ser buena persona con los que nos rodean y confiar en el efecto mariposa.

Primero, amigo mío, la salud. Siempre la salud. Empezamos bien.

Luego, la familia. ¿Bien?... Bueno... Hay que asegurar este tema. No se trata de ganar el partido, sino de pasar la eliminatoria. Es momento de ver más adelante y de saber quién estará con quién cuando las cosas vengan bien o mal... Aseguremos el tema familiar. No, porque toque sino porque nos haga bien.

Amigos, somos los que vamos detrás de la familia. Aquí estamos... sin saber qué decir ni qué hacer... o mejor dicho sabiendo que estamos para ofrecer salud.

Trabajo, dinero... Es muy importante. Pero lo es menos. Tocará, me imagino, pensar, reflexionar, actuar, mirar, sondear, pacientarse, impacientarse, joderse, fastidiarse, enfurecerse, frustrarse, abatirse, entristecerse... y seguir para delante.

Si se meten con uno, se meten con todos. Somos Oihala, somos Zabaltzen, somos Oihala Zabaltzen.

Todos estamos comprometidos en esta vida complicada que nos toca donde las burbujas (de todo tipo) nos han situado, probablemente, donde merecemos como especie. Con 30-45 años la vida se dirime en una eterna encrucijada.

Soy muy pesimista respecto a la especie y a la vida en general, pero con la familia Oihala, no. Con ella no soy pesimista. No quiero ni deseo serlo. Ahí decido ser creyente. Es mi derecho. Mientras, es cierto, nos encaminamos a un mundo negro y tenebroso lleno de artificios y apps que nos engañan invitandonos a vivir una vida más cómoda mientras nos arrebatan el misterio.... que qué misterio?... Pues, cuál va a ser?... EL DE LA VIDA! (la religión usa muy bien ciertas palabras a pesar de su perversión laica/profana).

No es solo uno, todos estamos preocupados por lo que nos rodea y que nos vuelve absolutamente vulnerables. Hoy nos toca más a unos que a otros pero a todos nos va a terminar tocando el azar del zodiaco.

Mientras, salud... mientras, familia.... mientras amigos.... mientras Oihala Zabaltzen. Mientras?... Por mi, toda la vida... hasta los 100 años si se puede, aunque lleguen días donde el calor y el omblido de uno y de todos nos distraigan... Es, sin duda, nuestro mayor tesoro.

Te quiero, amigo, os quiero a todos como no soy siempre capaz de expresar. Sois mi vida. De verdad, no es una frase hecha ni estética. Sin vosotros sería una cuarta parte o menos de lo que soy... O sea, que lo que no os gusta, también. Esto es un lote. Como la vida.

Ana, Joserra, Melisa, Edorta, Luis Mari, David G, David S, Mari Jose, Elsa, Sonia, Julia, Fran, Jon, Iker, Anskar... (Aitor)...Sois, junto con mi familia (mis hermanos, mi madre y los padres y hermano de Mari Jose) lo más importante.

Si se meten con uno, se meten con todos. Pero también, si a uno le va bien, todos somos, entonces, más felices.

Ahora toca, no saber qué hacer... no saber qué decir, pero hacer y decir. No hay otra.

Gracias a todos y a todas...

Aitor