UNA FLOR, UN JUGUETE, UNA ESCALERA... PARA SIEMPRE

GRUPO DE TEATRO OIHALA ZABALTZEN ANTZERKI TALDEA LA SALLE - LAUDIO



HISTORIA DE UNA ILUSIÓN

(Jorge Arechavaleta; tu nos enseñaste a volar)






"Lo que nos distingue no es la inteligencia, sino la imaginación". El Bibliotecario.

"La mayor recompensa del amor es la felicidad de amar". Una Fan de Bee Gees



miércoles, 29 de enero de 2014

La historia de una ilusión...

Uf, entre mensaje y mensaje cuelo el mio... (un poco de ironia...)

Hemos suspendido la obra. Hay varias formas de reaccionar a este impacto. Yo con la mía.

Primero, lo que preocupa es que no sea nada lo que nos haya hecho suspender y en breve podamos, de nuevo afrontar lo que queramos mientras la vida nos afronta, también, lo que ella dispone.

Segundo, lo que (me) preocupa es la historia de una ilusión. La fragilidad de nuestra existencia es enorme. Cuando eres joven, más joven, no te percatas. A los 40 te vas dando cuenta que cambia el chip "no esperas nada bueno de la vida, solo que no venga nada malo". Los que nos cuidaban se hacen mayores y los que cuidamos se hacen mayores. Nosotros nos hacemos mayores (jóvenes, pero avanzados). Y, decía, cuando eres joven te crees inmortal... ahora ya no tanto. La fragilidad nos acecha...la cana viene, la arruga, y poco a poco lo que está por llegar es menos que lo ha ido llegando. Es la vida. Si estamos tristes es porque somos felices.

Y me preocupas tú: como no. Eres parte de mi vida y estas bajadas de tension (suspender la obra) nunca nos viene bien a los corazones sensibles. Somos más de estress que de complacencia... porque entonces te acuerdas de todo... Jorge decía (y dice) "solo hacen cosas los que están ocupados (por eso están ocupados, claro)". Dejar de estar ocupados es desocuparse. Malo. Arriesgado. Te alcanza el padre con su enfermedad, o la madre con sus dolencias o el hijo que juega a todo lo que se puede jugar, o el trabajo que te aboca a unos horarios, economía, o yo qué se qué que nos vuelve locos, engreidos, estupidos o todo a la vez. Y un kilómetro se vuelve mucho. Un ensayo a las siete se vuelve inapetente.

Tercero: estamos abocados a ser de los Bee Gees. Uno lo elige, le eligen a uno. Somos de Oihala Zabaltzen hasta el final. Si hoy no estamos felices es porque hoy todavia no es el final de la historia... pero cuesta, claro que cuesta, la ostia y el copón. Pero solo hay dos opciones: o seguir o todas las demás que son infinitamente peores.

Qué por qué hablo de los Bee Gees? No hablo de ellos, lo sabéis.

Entradas, nos lo tenemos que mirar. Cada uno sabe lo que sabe y no sabe lo que no sabe.

Decisión de suspender la obra... Oihala Zabaltzen es, con mucho, la mejor noticia de nuestras vidas... Lección de vida la que nos hemos ofrecido. Maravilloso.

Besos Oihala... mamma mia nos espera, lo demás es mucho peor.

Aitor

http://www.youtube.com/watch?v=_pTpOcojhDU

lunes, 20 de enero de 2014

MAMMA MIA

Lo primero es comunicar:

Lamentamos comunicar que por un problema de enfermedad, el grupo de teatro Oihala Zabaltzen se ve obligado a suspender las representaciones previstas de Mamma Mia para el próximo 26 de enero y 2 de febrero. El grupo continúa con los ensayos, y mientras se soluciona el problema, bucar nuevas fechas para estrenar en la primavera.

Todas las historias tienen un final feliz, si hoy no estamos fellices es porque, todavía, no es el final de la historia. EL EXÓTICO HOTEL MARIGOLD

La decisión de la suspensión ha sido, como comentaba nuestro amigo E.A. (Edorta), uno de los momentos más mágicos de nuestros 26 años. Había cierto nervio e inquietud por comprobar como podiamos reaccionar ante una noticia así, un problema de enfermedad de una compañera. El grupo ha demostrado una madurez y claridad ejemplar.

De la misma forma que tenemos que decir aquello que igual no hacemos bien o pensamos que se puede hacer mejor, hay que decir lo que hacemos bien. Y esto ha sido inmejorable. Una gran demostración de amistad. Una nueva prueba que el grupo está muy por delante del teatro. Que ni nos gusta como disciplina ni arte en si mismo sino como excusa donde armar y vehicular nuestra amistad. nuestro cariño, nuestro amor.

Maravilloso. Comprobar como no hubo ni un segundo de duda. Ni una pregunta. Ni un por qué. Sólo hubo amor. Del que hace que uno se emcione. Ni tan siquiera hubo frustración (a fuerza de ser sinceros nos viene bien ensayar más)...

Uno siempre espera algo, bueno o malo, en este caso uno se vuelve, de nuevo hacer pequeño, porque esperaba una reacción buena pero no tan extraordinaria. Que lección de vida. La de todos, la de todas. No es que Melisa estuviera afónica, sino que el grupo tenía un problema y demostró que primero somos un grupo y luego ya vendrá el puto teatro de los cojones....

Qué suerte tenemos de ser Oihala.... y de no tener que pagar por entrar  o sallir (ni los del grupo ni el público)... Que bueno que seamos amigos. No hay que explicar nada, solo abrazarse y apoyarse.

Gracias.

Guau!


¿y ahora un temita de los Bee Gees?

martes, 7 de enero de 2014

MAMMA MIA...

Dejemos al lado el tono y sentido transcendente de la vida... total... para qué solo lo leamos tu  y yo...
- que dejes el tono, Aitor
- Vale

Quedan 19 días, dos fines de semana completos...

- y la obra
- Sí, la obra.

Por qué el nervio si va a salir bien?... el decorado, el atrezzo de cada uno, los bancos, los carteles, gestionar la reserva de espacio para entregar las invitaciones, las radios, el zuin, la cómoda, los micros, el baúl, los focos, la música, el programa... ´

- Y los niños
- Sí, e Ibone, Aimar y Joane. Y que no se hagan daño en los talleres (por el amor de Dios que haga bueno esos dos días de función).

Va a salir bien pero no la hemos disfrutado, a día de hoy, como se merece. Y si no la disfrutamos como se merece, para qué demonios la hacemos. De eso, hablaremos en el programa.

Estos 19 días van a ser los superguays... espero, de mi parte, superar mi "alterego de que es la leche lo superconcentrado que estoy yo y no los demás" y encuentre, por fin, el equilibrio perdido de exigir y disfrutar. Y disfrutar exigiendo. Y exigir disfrutando. Lo perdí en abril y sigo sin encontrarlo.

El resto... espero que ahora que sabemos que somos amigos, lo seamos de verdad... y nos sepamos, y nos comprendamos... por qué si no sabes, no puedes comprender, y si no comprendes, te sientes mal de no saber y de no comprender.

- Es fácil
-Dejate de lios, Aitor, al grano...

Que toca disfrutar... y exigir disfrutando y disfrutar exigiendo (y no hablo del teatro, amigo, amiga, hablo de ti y de mi). Es la puta vida, la puta y la vida.

Va a salir bien pero eso no importa, lo que importa, como le decían al de Pecos en "Tu cara me suena" es: ¿tú te lo has pasado bien?... Pues eso. Sino de qué.

Yo me esforzaré, pero no prometo nada... si encontraré o no el punto Libra de mi vida. Por Dios, espero que sí, me empiezo a aburrir de mi mismo... y ahora que sabemos que somos amigos, qué tal si lo compartimos? (y nos dejamos de hacer como si no lo fueramos)

Gracias...

- Por qué?
- Por leer... escribimos (y leemos) para saber que no estamos solos.

viernes, 3 de enero de 2014

26 AÑOS.... historia de una ilusión...

Quedan 20 días largos para el estreno de la obra número 58 de Oihala Zabaltzen.

No recuerdo si la cosa empezó en 1987 o ya en 1988 para llegar a tiempo en mayo de estrenar Los Aparecidos. Intuyo que ya por 1987 algí tenía que estar pasando porque entonces, no era como ahora, nos llevaba algo más de tiempo ensayar aquellos juguetes cómicos lasalianos.

Han pasado 26 años. Una vida. En Oihala nos encontramos ahora 14 actores y actrices, dos técnicos, algunos chavales que pululan entrando y saliendo... y otros dos amigos que la vida les ha llevado a otros lugares o paises pero siguen estando y formando parte del milagro del grupo.

En Oihala estamos los mejores amigos. Buenas personas que disfrutan de la compañía de buenas personas. Por eso no es fácil exigir, reclamar, pedir... No es fácil ser Zabaltzen...

El grupo hace lo que puede y más. Y lo hace, lo hacemos, porque nos va la vida en ello. Dejar de hacerlo sería dejar 26 años, toda una vida y, sobre todo, a sus personas, a nuestros amigos, a nuestros mejores amigos. Por eso, seguimos. Estamos abocados a nuestra vida, no hacerlo sería renunciar a una parte esencial de nuestra existencia, de nuestra identidad. De nuestra felicidad. Casi ya no nos pertenece la decisión, formamos parte de ella.

Por eso duele tanto lo que duele, porque el amor es enorme.

Insisto, el grupo hace mucho, muchisimo... y es muy dificil ponerse en el papel de coach y exigir una canción más, un tono más, un acorde más. Es dificil. Incluso, puede que resulte injusto.

Estamos en el 2014 y mi proposito de enmienda es mejorar mi actitud durante este curso... dejar de lado mis fobias (varias, que me crispan, y me vuelven un ser más odioso) y centrarme en mis filias, en Oihala. Pero no es fácil ser Zabaltzen: hay hijos, padres, trabajos, kms, compromisos, amigos, novios, famila, aficiones, otros amigos, otros grupos, otras personas, otros lugares... que tambien nos reclaman. Y así debe ser.

Hace poco una amiga, muy amiga a su pesar (con la que yo y este grupo se ha portado sinceramente mal) me decía: que no hay porqué contestar a los mensajes. Tiene razón, no hay por qué contestar a nada. Hay derecho de hacerlo. Uno puede decidir hacer o no hacer, decir o no decir, explicar o no explicar... y es uno el que decide hacerlo (porque tiene derecho a ello) y a convertirse en la persona que se convierte al decirlo o no decirlo, al ejecutar su derecho de la forma que estima oportuno.

No es fácil ser Zabaltzen.

Pero es una gozada.

A mi me gusta (y no significa más que eso, que me gusta, no que sea lo correcto), ser de las personas que en este grupo, con mis mejores amigos (y no es una frase vacía ni estética), decido exponerme. Ya sabéis como soy... sé que si me expongo lo hago entre amigos que me quieren. Eso me da la libertad de hacer lo que más me gusta hacer en este grupo. En otros órdenes de la vida, por desgracia, no ocurre así y no decido ser esa persona.

¿A qué viene todo este rollo?... A que la obra es en 20 días y que no somos un grupo de teatro, ni sabemos cantar ni bailar, y nos ponemos a hacer Mamma Mia conla confianza de que saldrá bien, además... y que lo haremos bien... y que el milagro es posible por la ilusión que le echamos, que es mucha, y que debe seguir siendo mucha (incluso más, aunque sea injusto decirlo).

Y que yo no puedo olvidar que hace un par de años, una persona se marchó de este grupo aludiendo temas personales, y nosotros, que tanto nos jactamos de ser amigos, decidimos no hacer nada por miedo a que hacer algo solo nos expusiera sin resultado alguno. Creedme, que a estas alturas, no me preocupa quién marchó, sí los que quedamos y lo que decidimos.

Yo con Oihala decido exponerme, y no me importa el resultado (esto sí es una forma de hablar, obviamente, me importa el resultado).... pero digo, que no me importa, porque sé que estoy entre amigos. Los mejores de mi vida. Mi vida.

Saludos y a por la 58.

No es fácil ser Zabaltzen pero es una gozada.